Capitulo 3: De paseo por Londres

(Álex)

-Bueno días.-me decía Ann mientras me zarandeaba para que me despertarse.

-¿Qué pasa? Hoy no hay que madrugar.-contesté  y me escondí entre las sábanas.

-Pero tienes que contarme muchas cosas, tienes que decirme todo lo que paso ayer después de que os dejara ayer hablando los seis.

Ainss.-me quejé.-Vamos a ver-dije mientras  me incorporaba.-estuvimos hablando de todo un poco y al rato se fue Liam.

-Lo sé, estuvo conmigo.-me dijo.

-¿Y no hay nada entre vosotros?-sentía curiosidad por saber si el amor de Liam era un amor correspondido.

-No.-contestó, pero pude notar como sus mejillas se sonrojaban.- ¡sigue contándome!

-Pues seguimos hablando y hablando y luego salí a bailar con Harry porque nadie más se ofreció y cuando terminamos ,los demás ya no estaban donde antes así que nos sentamos a hablar y hemos quedado hoy para comer juntos y después me va a enseñar la ciudad.-le conté todo de golpe, muy deprisa para que no pudiera interrumpirme.

Ann se quedó de piedra después de contarle todo e inmediatamente después corrió hacia mi armario y empezó a sacarlo todo.

-¿Pero qué  haces?-se estaba volviendo loca.

-¡¡Tienes que ponerte guapa y empezar a prepararte YA que si no, no te va a dar tiempo!!

Me empujó hasta el baño sin dejarme decir nada más.

Me duché, cuando terminé ,me enrolle en una toalla y salí, Encima de mi cama estaba un vestido verde claro muy simple con volantes a partir de la cintura que hacía mucho que no me ponía y una chaqueta fina negra y al lado encontré una nota:

“Tienes que ponerte ESTO, confía en mí, por favor, vas a estar preciosa. Déjate el pelo suelto hacia delante .Lo sé, me creo tu estilista personal o algo así, pero hazme caso ¡POR FAVOR!

PD.: Me voy que no quiero molestar cuando Harry venga.”

Tendría que matarla más tarde por todo esto  o agradecérselo, todo se verá.

 

Dejé la nota de nuevo sobre la cama y me puse el vestido, hacía muy buen día, lo que era raro en Londres así que había que aprovecharlo.

Me peiné tal y como Ann me había dicho y en ese momento llamaron a la puerta.

-¡Ya voy!-grité para que me oyera mientras salía del baño.

-Hola, Álex.-me saludó-esta muy guapa.

-Gracias. –contesté, al final tendría que agradecérselo a Ann.-pasa mientras termino de coger mis cosas.

 

(Harry)

Pase a su habitación a, era muy bonita aunque estaba un poco vacía, pero había que lo, Ann y ella tan solo llevaban una semana aquí.

-Ya estoy lista.-me dijo.

-Pues vámonos entonces.

Salimos de la residencia y subimos a mi coche.

-¿Qué prefieres? Comer en un restaurante lujoso en el centro  o en un Nando´s que supongo que querrás ir allí alguna vez si eres fan nuestra.

-Pues parece que me conoces mejor que yo misma-rió-me conformo con cualquier cosa así que tú sabrás…-me dijo al final.

-Pues vamos al Nando´s entonces.

Arranqué el coche y puse la radio .Ya era coincidencia que en ese momento estuviera sonando Little Things.

-Me encanta esta canción, es muy romántica.-me dijo poniendo voz de enamorada mientras suspiraba.

-I won’t let these little things…slip out of my mouth..But if I do…It’s you…(oh It’s you)…They add up to…I'm in love with you…And all these little things…-empezé  a cantar.-no cantas?

-Si me pongo a cantar esta canción la destrozaría por completo y ni tú ni yo queremos que eso pase.-me contestó y acabamos los dos riéndonos.

Cuando acabó la canción, los dos empezamos a hablar de nada en especial, sino de cualquier anécdota o lo primero que se nos pasara por la cabeza, los dos éramos así.

-Bueno, ya hemos llegado.

Aparqué y nos bajamos del coche. Entramos al restaurante y nos sentamos en una mesa del fondo. Pedimos lo primero que vimos y seguimos charlando mientras comíamos. De vez en cuando me quedaba perdido mientras la miraba, estaba preciosa y era una chica estupenda y aunque a veces parecía frágil, era fuerte y muy graciosa y alocada, eso también me gustaba.

Después de comer lo primero que Álex quería visitar era el London Eye y hacia allí fuimos, al fin y al cabo yo era su guía turístico, ¿no?

Como solo éramos dos, una mujer mayor subió con nosotros también.

-Guau!!, qué vistas hay desde aquí.-dijo asombrada y me quedé mirando cómo sacaba una cámara de su bolso.- ¿Qué pasa? Estoy de turismo por Londres, tendré que hacer fotos.-reímos los dos.

-¿Queréis que os haga una foto a los dos juntos?-nos preguntó la mujer que estaba con nosotros.

Como vi que Álex se quedaba un poco cortada contesté yo.

-Sí, por favor.-dije mientras le arrebataba la cámara de las manos a Álex.

Me acerqué a ella, la di la cámara y volví junto a Álex, me arrimé a ella para entrar mejor en la foto y sonreí. Álex hizo lo mismo.

-Muchas gracias.-le dije a la mujer mientras me devolvía la cámara, me quedé mirando la foto.-Salimos muy bien los dos, ésta foto la quiero tener yo también.-le dije a Álex.

Después de esto seguimos mirando las vistas y cuando bajamos seguimos visitando la ciudad. Lo siguiente que Alex quería ver era el Big Ben. Pero cuando bajamos, empezó a llover.

-¡Álex, me parece que nos va a tocar correr si no quieres que nos empapemos enteros!

Así que corrimos hasta que llegamos al coche.

-¡No puedo entrar, que te voy a mojar todo el coche!-me dijo.

-¡Venga entra, si yo estoy igual que tú!

Así que entramos en el coche. Estábamos los dos mojados de arriba abajo.

-Bueno ahora también conoces como es el tiempo en Londres.-comenté.

-Yo aquí empapada y helada de frío, no entiendo cómo me puedes hacer reír pero lo consigues.-y entonces reímos los dos.

-Creo que vamos a ir a mi casa, está más cerca y llegamos antes, así no coges un resfriado o algo.-la dije-y como creo que ya me conoces,  que yo no voy a parar hasta conseguirlo.

-¡Rumbo hacia la casa Larry Stylinson entonces!-dijo mientras simulaba a un capitán de barco.